Una importante obra de transmisión, que permitirá reforzar la infraestructura eléctrica de la zona sur poniente de la Región Metropolitana, puso en operación la semana pasada CGE Transmisión, una empresa CGE.
Tras once meses de construcción, y una década de planificación, el pasado 6 de marzo la compañía puso en servicio la Línea de Transmisión 66 kV que va desde la subestación Fátima, en la comuna de Paine, hasta la subestación Isla de Maipo.
La obra, que tiene 24 kilómetros de extensión, cuenta con más de 180 estructuras eléctricas de apoyo con una capacidad de transmisión de 52 MW (megawatts) y demandó una inversión de $13.500 millones, una de las mayores realizadas a la fecha por CGE Transmisión.
Christian Olave, Gerente Ingeniería y Construcción de CGE Transmisión, señaló que “esta nueva Línea de Transmisión forma parte de un grupo de proyectos muy anhelados por la compañía, ideados para beneficiar directamente a más de 35 mil clientes de las comunas pertenecientes a de la provincia de Talagante, mejorando con estas nuevas intalaciones la calidad y continuidad del suministro eléctrico mediante la entrega de una alternativa de suministro de energía a la provincia. La operación de esta línea permitirá, entre otras cosas, recuperar en menor tiempo posibles interrupciones de suministro eléctrico y entregar más energía para el desarrollo económico de la zona”.
Las comunas beneficiadas por este proyecto son principalmente Isla de Maipo y Talagante. La construcción del tendido tuvo una serie de desafíos técnicos y humanos, entre ellos, su desarrollo en plena pandemia.
“La construcción de esta nueva línea debió enfrentar las complejidades propias de la pandemia, como restricciones de movilidad, cuarentenas y otras medidas de seguridad aplicadas por CGE Transmisión con el fin de reducir al mínimo posibles contagios. En términos de seguridad, también estamos muy contentos, ya que terminamos las obras con una tasa de cero accidentes, lo cual se enmarca en uno de los principios que CGE tiene en términos de seguridad: Todos los trabajos se deben planificar y ejecutar pensando en la seguridad”, señaló Olave.
Estas nueva línea es parte de un grupo de proyectos de refuerzo de la infraestructura eléctrica que se viene realizando en la Provincia de Talagante. Con anterioridad, CGE puso en operación la Línea Santa Marta-Padre Hurtado y la subestación Padre Hurtado, que abarcó a clientes de El Monte, Peñaflor y Padre Hurtado.
En términos técnicos, el tendido tuvo desafíos como usar un conductor de alta capcidad para atravesar la rivera del Río Maipo con una distancia de casi 900 metros de ancho, construir tramo de red soterrada en 66 kV e instalar 2 kilómetros de estructuras de fibra de vidrio para minimizar el impacto en algunos predios agrícolas. Asimismo, también contempló la construcción de un paño de llegada en la Subestación Isla de Maipo -esto es, las instalaciones necesarias para conectar la nueva línea – así como también el realizar las obras necesarias para conectar la línea en la subestación Fátima.